La Segunda Misión Benaiges ya es una realidad. Veintitrés niños han iniciado esta semana un viaje muy especial para conocer el mar, cumpliendo así la promesa que el maestro Antonio Benaiges hizo en 1936 a sus alumnos de la escuela de Bañuelos de Bureba, Burgos. Una promesa que nunca pudo cumplir, ya que el maestro catalán fue asesinado al inicio de la Guerra Civil.
La Asociación Escuela Benaiges, impulsora del proyecto, inició el viaje el pasado domingo desde Miranda de Ebro con los niños participantes, procedentes en su mayoría de Cartuja (Granada) y con la presencia de tres menores de familias palestinas refugiadas en España. Durante el trayecto hacia Cataluña, tierra natal del maestro —Mont-roig del Camp—, los niños realizan visitas culturales y actividades lúdicas, acompañados por educadores y voluntarios.
Este proyecto, bautizado como “Misión Antonio Benaiges”, persigue fomentar la inclusión social y ofrecer a estos menores con pocos recursos la oportunidad de conocer nuevos lugares y vivir experiencias inolvidables, entre ellas ver por primera vez el Mar Mediterráneo. La iniciativa, que nació el año pasado y tuvo gran acogida, busca rendir homenaje al maestro Benaiges y mantener vivo su legado educativo y de esperanza.











