El pequeño comercio de Burgos se resiente: uno de cada cuatro negocios ha cerrado en los últimos años
La competencia online y el cambio en los hábitos de consumo amenazan la supervivencia del comercio tradicional en la provincia

El comercio de proximidad en la provincia de Burgos atraviesa un momento delicado. Así lo puso de manifiesto la Confederación Empresarial Regional de Comercio (CONFERCO) durante una reunión celebrada en la capital burgalesa, en la que se analizó la situación actual del sector y los desafíos que enfrenta.
Según los datos presentados, uno de cada cuatro establecimientos ha bajado la persiana en los últimos años, una cifra que refleja la transformación que vive el modelo comercial en toda Castilla y León. Pese a su relevancia —el comercio minorista representa cerca del 5% del Producto Interior Bruto regional—, mantener un negocio abierto se ha convertido en una tarea cada vez más complicada.
Entre los principales factores que explican este descenso se encuentran el crecimiento de las plataformas de venta online, los cambios en las preferencias de los consumidores y los problemas estructurales de la comunidad, como el envejecimiento de la población y la dispersión territorial. Todos estos elementos han contribuido a debilitar el tejido comercial local, especialmente en los municipios más pequeños.
Castilla y León cuenta actualmente con unas 20.500 empresas dedicadas al comercio, de las cuales 16.000 son minoristas. En conjunto, el sector da empleo a unas 80.000 personas, y la mitad de ellas trabaja por cuenta propia. Estas cifras muestran el peso económico y social de un sector que, a pesar de las dificultades, sigue siendo clave en la vida diaria de los pueblos y ciudades.
Durante el encuentro, los representantes de CONFERCO también lanzaron un mensaje de esperanza. Aunque el escenario es complejo, no todo está perdido. La organización apuesta por reforzar la colaboración entre comercios y por impulsar el apoyo institucional para fomentar la modernización del sector. Adaptarse a los nuevos hábitos de consumo y aprovechar las oportunidades del entorno digital se presenta como la vía más sólida para garantizar la continuidad del comercio local en Burgos y en toda la región.










