La Junta apuesta por que los ayuntamientos regulen el límite de pisos turísticos
Medidas para facilitar el acceso a la vivienda y controlar el crecimiento del alquiler turístico

La Junta de Castilla y León avanza en la elaboración de una batería de medidas destinadas a mejorar el acceso a la vivienda en la comunidad, que incluye ayudas al alquiler, descuentos en pisos de titularidad autonómica, avales para inquilinos y mecanismos de protección para los propietarios, con el fin de garantizar el cobro de la renta y fomentar la seguridad en los contratos.
Estas acciones forman parte de un esfuerzo continuado de la Administración regional para responder a los retos actuales del mercado inmobiliario y ofrecer soluciones que permitan a más personas acceder a una vivienda digna. Desde la Junta defienden que, pese a los avances logrados, la política del Gobierno central ha contribuido a que un número creciente de ciudadanos se refugie en la inversión en pisos turísticos, debido a la incertidumbre y la inseguridad que genera el alquiler a medio y largo plazo.
Ante esta situación, el Ejecutivo autonómico propone profundizar en la regulación de los pisos turísticos, estableciendo que sean los propios ayuntamientos quienes tengan la potestad para fijar un tope o límite máximo en el número de estos alojamientos autorizados dentro de sus municipios. Esta medida permitiría adaptar las políticas a las particularidades y necesidades de cada territorio, controlando el impacto del alquiler turístico en el mercado residencial local.
No obstante, la regulación de los pisos turísticos en Castilla y León es una competencia compartida con la Consejería de Cultura y Turismo, lo que complica la adopción rápida de cambios normativos. Además, el actual gobierno autonómico se encuentra en minoría en las Cortes de Castilla y León, lo que dificulta la aprobación de esta iniciativa antes de que finalice la presente legislatura.
Por otra parte, desde la Junta se recalca que, a diferencia de otras zonas de España (como grandes ciudades o regiones costeras donde el turismo masivo ha provocado una presión notable sobre el mercado de la vivienda), en Castilla y León no se registra a día de hoy un problema grave relacionado con la proliferación de pisos turísticos. Sin embargo, el Ejecutivo insiste en la importancia de anticiparse y contar con herramientas de control para garantizar que esta modalidad de alojamiento no afecte negativamente al acceso a la vivienda para los residentes.










